Hay mañanas en que observo como Libertad duerme tan profundamente, que no nota que me levanto... otras el frio la despierta y delicadamente con su pata delantera jala las cobijas de mi cuello para que la deje entrar... Gilberto y ella son como dos bolsas de agua caliente en mi cama, y a veces, me asusta la idea de que no estén. Tengo sueños recurrentes, donde Libertad siempre se me pierde y despierto asustado buscando entre las cobijas... y ahí esta, dormida, frágil y segura, sintiéndome cerca. Tiene 13 años... y a veces me asusta que ya no este un dia, ... ¿será que por eso la pinto tanto?...
Gilberto es como un torito, atento, tosco y juguetón, siempre a mi lado, buscando mi cara, poniendo su cabeza en mis piernas cuando estoy en la compu y quiere agua o dormir... Gilberto siempre detrás de Libertad, siempre atento a lo que hacemos, es un bebe en esta casa. El próximo 3 de noviembre cumplirá 7 años.
No lo he cruzado, seguro él cree que es un cachorro todavía... pero, es que no veo que quiera otra cosa... a veces creo que será muy difícil que se cruce mientras este cerca de Libertad. pero bueno, son mis perros, mis amigos, mis hijos, mis eternos modelos, y compañeros de vida.
