Debo confesar que la existencia de Uma en mi vida me da una seguridad que pocas veces me da alguien... Dormir a su lado, es una forma segura que tengo de no sentir ese miedo infantil de estar solo en la cama... Creo que estamos en una época muy sedentaria, ella pasa muchas horas al día tirada en la cama, o será que el calor le abruma tanto que no sabe hacer otra cosa.
Hay días en que sólo se limita a observarme, a ver que hago o que dejo de hacer, me sigue con sus ojitos por todo el espacio, y tras tantas, tan sólo está mirando por la ventana... Pero cuando me tiro a dormir con ella, se acorruca junto a mi entre mi torso y mi brazo poniendo su cabeza en mi hombro, emocionada y satisfecha de que estamos juntos. Y me siento muy feliz.
Uma y yo, estamos sólo en casa muchas horas al día. Aveces extraño a Libertad, después de todo compartí con ella 18 años de mi vida y doy por hacho que Uma estará el mismo tiempo conmigo. o al menos ese es mi deseo...
Quiero llevarla a la playa, quiero irme los inviernos completos a un sitio cálido con ella y sólo dibujar y dibujar y dibujar y correr por la playa juntos, para que sienta el aire y la brisa del mar.